Vigo es la capital de las camelias. La simbiosis entre Vigo y las camelias es patente en muchos ámbitos de la vida de sus ciudadanos aunque en numerosas ocasiones pasa desapercibida.
La relación de Vigo con las camelias comenzó a fraguarse hace más de 150 años, concretamente en 1860, con la llegada de la Camellia japonica más antigua de la ciudad, la conocida como “Matusalén”.
Desde esta época las camelias forman parte de la ciudad olívica que, a falta de olivos, viste sus calles y jardines con camelias.
El Matusalén es la madre de las camelias viguesas y una de las más antiguas de Galicia. Este magnífico ejemplar se encuentra en el Palacio de Quiñones de León situado en el parque de Castrelos y que actualmente acoge una de las mejores pinacotecas de arte gallego. En lo florísticamente hablando, el Matusalén no está solo, sino rodeado por otras camelias de gran porte y de un inmenso valor histórico, razón por la que este jardín está dentro de la Ruta de la Camelia. Esta Ruta de la Camelia recorre los principales jardines gallegos en los que la camelia es el elemento más representativo, que da belleza, color y un estilo propio y característico a dichos jardines.
Dentro de esta Ruta también se incluye otro parque de Vigo, el Parque de O Castro, desde cuya fortaleza se puede apreciar una de las mejores vistas de la ría de Vigo. No es casualidad que de los 14 jardines incluidos en la Ruta de la Camelia dos estén en Vigo, y que Vigo sea la única población con dos jardines en este listado.
En todas las áreas verdes de Vigo se encuentran ejemplares de camelias, camelias japonicas, sasanquas, reticulatas y así hasta cerca de 20 variedades diferentes. Incluso una variedad de Camellia japónica tiene nombre propio: Ciudad de Vigo.
Es de todo el mundo conocido que las camelias encuentran en las Rías Bajas un lugar idóneo para su desarrollo. Álvaro Cunqueiro dijo hace años (1965) «¡Y qué bien están aquí [las camelias] en un mundo de suaves matices y onduladas formas, en un clima humano, donde ellas solas, durante unos meses, son la única flor!»; y nada más lejos de la realidad porque claramente en Vigo las camelias se encuentran como en casa.
La camelia es un símbolo de Vigo desde el año 1966, año en el que se celebra el II certamen de la camelia, y que en Vigo alcanza tanta importancia que dicho certamen se convirtió en “Exposición Internacional de la Camelia”. Como símbolo de la importancia de este certamen se inaugura ese mismo año la Avenida de Las Camelias. A partir de ese año la relación entre ciudad y planta no dejan de crecer. Incluso un documental de RTVE sobre Vigo y la Camelia del año 1975 reza «El cariño que el gallego siente por su tierra parece simbolizarse en esta planta»
Vigo es la única ciudad gallega que da nombre a una gran avenida bajo la denominación de este planta, la Avenida de las Camelias, y que por supuesto está decorada por esta magnífica planta que da color e ilumina las calles viguesas durante los meses de invierno. Pero no es la única, muchas de las grandes avenidas y calles están decoradas por esta magnífica flor, símbolo de belleza y tradición. Entre ellas se puede nombrar García Barbón, República Argentina, Marqués de Valladares… Y es que en Vigo se podría hacer un recorrido por las principales calles teniendo siempre una camelia a tu lado, un paraíso de belleza natural difícilmente alcanzable en otros puntos del planeta.
En Vigo se respira camelia. Y, como no podría ser de otra forma, los vigueses también muestran su aprecio por esa planta poniéndole nombre a cientos de negocios diferentes; a modo de ejemplo en Vigo hay centros comerciales, escuelas infantiles, clínicas, asesorías, floristerías y hasta confiterías con el nombre de esta planta.
Pero la camelia es mucho más que una planta de flores bonitas. De esta planta, y más concretamente de sus brotes, se extrae una de las bebidas más populares a nivel mundial, el té. Té blanco, té verde, té negro o rojo en función de la fermentación de las hojas y que satisfacen los gustos de miles de personas a nivel mundial.
Pero el té no es lo único que se extrae de esta maravillosa planta. Otro producto sorprendente es el que se extrae de las semillas de la camelia, el aceite de camelia.
El aceite de camelia es un aceite seco que hidrata la piel del rostro, cuerpo y cabello desde las capas más profunda dejándolo seco, hidratado y brillante durante horas.
Este aceite forma parte de un ritual de belleza empleado por las Geishas japonesas, el ritual SAHO, y que está teniendo una gran acogida en los países occidentales. Un aceite natural clasificado como uno de los mejores aceites cosméticos y que no es casualidad que la única empresa que lo fabrica en Europa haya elegido Vigo para instalarse.
Todo esto hace de Vigo un lugar muy especial para las camelias que esperemos que sigan colonizando la ciudad a todos los niveles, haciéndola única, para alcanzar una sociedad en consonancia con la naturaleza y más concretamente con la camelia.